Este año, supongo que os habréis dado cuenta del elevado número de mosquitos que tenemos aún por estas fechas… Los mosquitos, en algunos casos, pueden ser transmisores de algunas enfermedades, como por ejemplo la Leishmania.
La Leishmaniosis canina es una enfermedad parasitaria grave, causada por un protozoo. Es una zoonosis por lo que puede afectar tanto a animales como a seres humanos. Además es una enfermedad endémica en muchos países, entre los que se encuentran todos los de la cuenca mediterránea, es decir, nosotros.
Transmisión Leishmania
El vector en los países mediterráneos es el flebotomo, un mosquito que tiene su periodo de actividad entre los meses de mayo y noviembre. Teniendo mayor actividad en las horas de la puesta de sol y en zonas con elevada humedad.
La vía de transmisión habitual de la Leishmaniosis canina es mediante la picadura de un flebotomo. Tanto los perros sintomáticos como los asintomáticos son potenciales transmisores de la enfermedad, por ello es tan importante la prevención de la picadura de dichos “mosquitos”.
Signos clínicos Leishmania
La leishmaniosis canina es una enfermedad sistémica que puede potencialmente afectar a cualquier órgano o tejido y se manifiesta con signos clínicos no específicos. Las lesiones cutáneas son el signo clínico más habitual aunque la enfermedad renal puede ser la única manifestación clínica de la L. canina y puede progresar a un estadio final de enfermedad renal. Por eso si vives en Valencia y tu animal esta “raro” o tiene un “peladito” que no cura vale la pena descartar la Leishmania.
Diagnóstico Leishmania
Con un simple análisis de sangre podremos saber si nuestro animal está infectado por el parásito de la Leishmania, la detección precoz es clave para la cura del animal.
Conscientes de su gravedad, en la Clinica Veterinaria Sedavi, en los meses de noviembre,diciembre y enero realizamos la Campaña de detección de la Leishmania a un precio reducido, porque sabemos lo importante que es en el pronóstico el que lo detectemos a tiempo.
¿Existe tratamiento?
Existen varios tratamientos en función de lo avanzada que esté la enfermedad y será el veterinario el que instaure uno u otro en base a los resultados de los análisis y el estado general del animal